El alcalde y la propiedad del solar de la antigua Aduana firman el convenio para desbloquear la zona

El alcalde de Salou, Pere Granados y el propietario de la empresa AMSAMAR SA, Enrique Manero, han firmado hoy el convenio que desbloquea definitivamente la paralización urbanística de los terrenos de la antigua Aduana, en la calle Barcelona, ​​en pleno centro comercial. Se trata de un problema "de ciudad" que se ha resuelto después de 9 años. En el acto, ha estado presente también el concejal de Gestión de territorio, Marc Montagut, además del secretario de la corporación, Francisco Alijo.
Recordemos que las causas de la situación del solar se remontan en la aprobación del POUM en el año 2003, que generó un recurso por parte de la propiedad y una sentencia del TSJC el año de 2010, donde se reconocía el derecho del empresa a pedir una indemnización para compensar el perjuicio que le había ocasionado el POUM, que había modificado los aprovechamientos y los usos urbanísticos del solar, suponiendo un agravio comparativo en relación al entorno, de uso residencial. Con la modificación puntual del POUM, en el solar (de unos 2.300 m2 de superficie), se le otorga la antigua calificación de uso residencial, si bien prevé planta baja y la primera planta de uso comercial.
Hoy, finalmente se acuerda-después de su aprobación por unanimidad en el pleno de este mes de abril-llevar a cabo la modificación urbanística del solar de la antigua Aduana en ejecución de sentencia.
El administrador de sociedad, Enrique Manero, ha asegurado tras estampar la firma en el convenio que está muy satisfecho de cómo ha llevado la negociación en estos últimos tiempos-desde que él es administrador-y ha vaticinado que " el nuevo proyecto dinamizará la zona; le hace mucha falta y ahora es el momento de sacarlo adelante y de ver las nuevas posibilidades para hacer una actividad con demanda". Por su parte, el alcalde de Salou, Pere Granados, ha destacado que "estamos muy contentos por el entendimiento de ambas partes ya que es un problema que viene de lejos y buscábamos una solución que no costara dinero al municipio de Salou y que además tengamos una parte importante de uso comercial para dar vida al casco antiguo ".